El agua de lavado es recogida en una cubeta que está debajo del aparato.
Para evitar tener que vaciarla demasiado a menudo, se aconseja conectar el desagüe a un tubo flexible con una longitud máxima de 200 cm (no incluido) y ponerlo en una rejilla en el suelo o en un desagüe de pared. El desagüe del sistema de humidificación, de color azul, debe conectarse a un punto de desagüe en el suelo. En su defecto, desplazando el tubo previamente indicado dentro del compartimento técnico y uniéndolo al tubo de desagüe de lavado, es posible vaciar el agua en el depósito de recogida, que debe ser vaciado cada 4 horas.
El desagüe debe tener las siguientes características:
- tener sifón;
- tener una pendiente mínima del 4%;
- tener un air gap* de al menos 25 mm;
- no presentar estrangulamientos;
- tener un diámetro no inferior al de la conexión de desagüe.